Cuando se fundó Goodyear Tire & Rubber Company en 1898, Estados Unidos estaba viviendo el auge de la revolución industrial. En un momento efervescente y en la búsqueda de formas de expandirse más allá de las llantas, Goodyear decidió entrar en el negocio de las aeronaves más ligeras que el aire y terminó creando uno de los íconos corporativos más duraderos del mundo, el dirigible Goodyear. En 1910 entró en la industria de la aviación, al establecer un departamento de aeronáutica para comercializar telas engomadas y revestimientos para aviones y aeronaves ligeras; en 1912, allanó el camino para la construcción del primer globo y para la participación en competencias nacionales e internacionales de globos al año siguiente
El negocio evolucionó. En 1916, Goodyear compró un terreno de 720 acres al sureste de Akron, Ohio (donde hasta el día de hoy tiene su sede mundial) para servir como campo de aviación e instalación de fabricación. El área incluía un hangar llamado Wingfoot Lake, un tributo al logotipo de Goodyear, el pie alado del dios romano Mercurio. En marzo de 1917 Goodyear comenzó la producción de nueve aeronaves para la Marina estadounidense. Después de 1920, algunos modelos del dirigible Goodyear comenzaron a salpicar el cielo de América, llevando el nombre de Goodyear a los lugares más remotos de los Estados Unidos. Desde Hollywood a Ohio y desde Nueva York a Florida, los dirigibles se hicieron notar.
Construido en 1925, el Pilgrim fue la primera aeronave comercial no rígida impulsada por helio. Con una rueda de tren de aterrizaje acoplada a un coche, el “Peregrino” en español, estaba en la cima de la tecnología. La aeronave fue la primera en ser usada para acciones de relaciones públicas, siendo condecorada cada diciembre como «Santa Claus Express». Después del lanzamiento del Pilgrim, la flota se amplió con la inclusión de cinco dirigibles más. Todos fueron nombrados en honor a los grandes navíos de la historia, una tradición que continua hasta este siglo 21.
En 1930, el dirigible Defender se convirtió en la primera aeronave del mundo en llevar una señal luminosa. Desarrollado por H. Webster Crum y llamado Neon-O-Gram, el letrero consistía en diez paneles desmontables unidos al lateral del Defender y que permitían la visualización de texto estático cuando se utilizaban tubos de luz de neón. En 1940, el Reliance, Ranger y Resolute fueron equipados con un tocadiscos, un micrófono y un altavoz y «emitían» saludos en vivo a la audiencia. El experimento no duró mucho tiempo y el proyecto de audio se archivó, pero la señalización permaneció y se convirtió en el símbolo de la aeronave que conocemos hasta hoy.
Los dirigibles de Goodyear son aprovechados para publicidad
En 1946, Goodyear puso a Ranger, Volunteer, Enterprise, Mayflower y Puritan al servicio de la publicidad. En el mismo período se destaca el modelo ZPG-2, que puede permanecer en el aire por más de una semana. La prueba de esto fue reforzada con un modelo similar, llamado Snow Bird, que ostenta el récord de resistencia al vuelo con el récord de 11 días en el aire, sin reabastecimiento y sin aterrizar.
Con televisores en la mayoría de los hogares de EE.UU., los deportes en vivo encontraron una nueva forma de atraer a los aficionados. Desde proporcionar vistas aéreas en vivo de los principales eventos deportivos hasta mostrar el nombre de Goodyear a miles de personas en un campo de juego, las aeronaves estaban listas para enfrentar la nueva década.
En 1963, el Mayflower VI se amplió a 4.170 m³ y Goodyear construyó otro del mismo tamaño, el Columbia II. El tamaño de los dirigibles seguiría creciendo, pudiendo llevar más televisión moderna y equipos de señalización electrónica. El primer Super Bowl, en enero de 1967 en Los Ángeles, California, fue transmitido en vivo y el dirigible Goodyear Columbia compartió la experiencia proporcionando vistas aéreas en vivo.
Los “Blimps” se han convertido en algo común en los eventos deportivos, en la televisión e incluso en el cine. Con apariciones en películas como «¡Help!», «Hole in the Head» de los Beatles con Frank Sinatra y una de las primeras películas para adolescentes, «Beach Blanket Bingo «, con Frankie Avalon y Annette Funicello, los dirigibles de Goodyear parecían estar en todas partes. De 1970 a 1979, fueron emisores activos en más de 275 eventos de televisión en los Estados Unidos. Entre ellos se encuentran el Super Bowl, las 500 de Indianápolis, el Sugar Bowl, el Cotton Bowl, el US Open de Tenis de los Estados Unidos, el PGA Golf, el Grand Prix, el Derby de Kentucky y las 500 de Daytona, entre varios otros.
Historia del dirigible: 1980
Los dirigibles Columbia y América trabajaron juntos para transmitir los Juegos Olímpicos de Verano de 1984 en Los Ángeles a miles de millones de personas en todo el mundo. Fue la primera vez que dos dirigibles de Goodyear se unieron para dar cobertura a un evento. Otro punto culminante de la década (1980), justo antes de los juegos, fue la primera Serie Mundial televisada (Final del Campeonato de Béisbol Americano) por un dirigible de Goodyear; en total, hubo ocho coberturas de la Serie Mundial.
Los años 2000
En los primeros seis años del nuevo milenio, Goodyear renovó toda su flota con la construcción y el lanzamiento del “Espíritu de Goodyear”, que recibió el nombre para homenajear a las decenas de miles de empleados de Goodyear Tire & Rubber Company.
Con el avance de la tecnología de la televisión, «alta definición» era el término del momento. El “Spirit of Goodyear” se convirtió en el primer dirigible que proporcionó video en directo en alta definición para un evento deportivo, continuando así la superioridad tecnológica que los dirigibles de Goodyear han demostrado en los últimos 50 años. Hoy en día, la flota de dirigibles de Goodyear sigue impresionando al público con vistas aéreas giro estabilizadas de los principales eventos deportivos. En 2014, los juegos del NCAA Bowl en enero, seguidos por el estreno de la Major League Baseball y los playoffs de la NBA, son sólo algunos de los eventos que los dirigibles cubrieron. 2015 marcó el 90º año de operación continua del programa de dirigibles de Goodyear, el más largo de la historia y ciertamente el más exitoso.